29/06/2023 - 19:00 - Librería Proteo

Presentación del nuevo libro de la popular psiquiatra ¿Por dónde se sale? (Planeta) en conversación con Héctor Márquez sobre el miedo y las formas de deshacerlo

29/06/2023 - 19:00 - Librería Proteo
Entrada libre hasta completar el aforo.

Es, probablemente, una de las más populares psiquiatras de España y las que más empeño ha puesto en divulgar para todo el mundo las formas de mantener la salud mental y emocional saneada. Tanto, que se llama a sí misma en twitter “frikiatra”. Anabel González trabaja en el Complexo Hospitalario Universitario A Coruña, pero también hace talleres, charlas y escribe libros que sanan. Much@s se sirvieron de su sabiduría y capacidad comunicativa durante el confinamiento. Su último libro ¿Por dónde se sale? (Planeta) trata sobre el miedo, cómo opera en la psique, sus consecuencias cuando se desborda -angustia, ansiedad, obsesiones…- y la forma de afrontarlo. Lo vamos a presentar en El Tercer Piso de Librería Proteo en una charla entre la doctora González y el periodista y director de ETP Héctor Márquez el próximo jueves 29 de junio a las 19:00, con entrada libre. Firmará ejemplares al acabar el acto. Porque la salud mental es importante.

¿Por dónde se sale? Sinopsis

¿Cómo podemos aliviar el malestar psicológico? El miedo, la angustia, las obsesiones o la ansiedad son laberintos en los que es fácil sentirnos perdidos. Entender estos estados mentales y, sobre todo, aprender a encontrar una salida es uno de los objetivos de este libro.

En ¿Por dónde se sale? la psiquiatra Anabel Gonzalez tratará sobre los miedos y ahondará en una de las claves para deshacerlos: la seguridad. Pero ¿cómo alcanzarla? Si desde niños nos hemos sentido cuidados y con autonomía, funcionaremos con un estilo de apego seguro, que nos ayudará a afrontar las dificultades de la vida. Pero, si esto no ha sido así, a lo largo de estas páginas descubriremos pautas y ejercicios para que la seguridad crezca tanto dentro de nosotros como en nuestras relaciones con los demás. Este libro es una guía para fortalecer nuestra salud mental y salir de los bucles mentales que nos impiden avanzar.


¿Qué es el miedo? (extracto del libro)

El miedo es una de las emociones básicas del ser humano.

Todas las emociones son importantes y cumplen una función esencial, pero podemos decir que el miedo, literalmente, nos salva la vida: sin miedo, nuestra especie se habría extinguido hace mucho tiempo. Como cualquier animal, los seres humanos contamos con una serie de sistemas internos que nos sirven para sobrevivir, y la señal central que activa esos sistemas es el miedo. Nuestro instinto de supervivencia percibe los matices de una situación potencialmente peligrosa con rapidez, sin que nos dé tiempo a ponernos a pensar. Estos mecanismos se ponen en marcha ante una amenaza y se desactivan cuando concluimos que o hay peligro. Por ejemplo, nuestro corazón se pone a mil cuando oímos un ruido mientras vamos andando por la calle de noche, preparándonos por si tenemos que echar a correr, pero se calma cuando comprobamos que el sonido no venía de alguien dispuesto a atacarnos, sino de un gato que había hecho caer una maceta. Durante un tiempo, nuestra respiración sigue acelerada, el pulso rápido, quizás notemos un sudor frío… Mientras caminamos se nos va pasando y, cuando llegamos a casa, es cuando realmente notamos alivio: ya estamos en un sitio seguro. Si tenemos un gato, cuando se nos acerque y nos ronronee en el sofá, pensaremos en el gato de la calle y nos saldrá una sonrisa: sabemos que los gatos son traviesos. El recuerdo se teñirá de seguridad y, ya pasadas unas horas, pensaremos: «Vaya susto he pasado»; poco a poco, los residuos de miedo se irán soltando de nuestro cuerpo. Al día siguiente, después de dormirlo, nuestro cerebro probablemente habrá archivado el recuerdo en la sección de «posibles causas de ruidos en la calle».

Después, y aquí es donde la cosa se pone interesante, el cuerpo debería volver a un estado de tranquilidad: pasado el peligro, ya no tiene sentido que el miedo esté activado. Como veremos más adelante, a este proceso se lo conoce como extinción del miedo. Y es aquí donde muchas veces empieza a haber problemas. A veces, nuestra forma de intentar solucionar las cosas es emprender una pelea contra lo que sentimos tratando de «vencer» o de «eliminar» el miedo. Esta estrategia no deja de ser una pelea contra nosotros mismos, y el miedo es algo tan intrínseco al ser humano que no puede evitarse. Es parte de la vida, ha de surgir muchas veces (malo sería que no lo hiciera) y no nos queda otra que aprender a convivir con él. Sí, claro que es una emoción desagradable, pero podemos aprender a pensar cuando estamos asustados y a poner los pies sobre una base firme y segura. Veremos a lo largo del libro por dónde se sale del miedo y por dónde se llega a la seguridad, tratando de entender un poco mejor a nuestro compañero de viaje.

Anabel González

Anabel González es psiquiatra, psicoterapeuta y doctora en Medicina. Trabaja en el Complexo Hospitalario Universitario A Coruña (CHUAC). Es presidenta de la Asociación EMDR España, cuya web es www.asociacionemdr.es. Desde hace años imparte formación a otros especialistas, es entrenadora acreditada de terapia EMDR y da cursos sobre esta metodología terapéutica desde www.institutoimaya.com. Es también tutora de doctorado en la Universidade da Coruña (UDC) y profesora invitada en el máster de Psicoterapia con EMDR de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED). Es autora de Lo bueno de tener un mal día (Planeta, 2020), Las cicatrices no duelen (Planeta, 2021) —ambos traducidos a varias lenguas—. También de No soy yo (2017) y de algunos libros especializados, y ha dirigido varios proyectos de investigación sobre estos temas.

@anabelgonzalez_emociones5.0

@DAnabelGonzalez

La psiquiatra Anabel González descubre los secretos del miedo: «cuándo nos ayuda y cuándo nos paraliza»

Anabel González es psiquiatra, psicoterapeuta y doctora en Medicina. Trabaja en el Complexo Hospitalario Universitario A Coruña (CHUAC) y desde hace años es entrenadora acreditada de terapia EMDR.  Se trata de una terapia de desensibilización y reprocesamiento por movimientos oculares, que ha demostrado científicamente ser muy útil para ayudar a las personas a recuperarse de un trauma, la depresión, el estrés postraumático e incluso la ansiedad.

Ahora, la doctora ha publicado su cuarto libro ¿Por dónde se sale? (Planeta, 2023), donde enseña a aliviar el malestar psicológico para fortalecer la salud mental.

Y es que, como explica a El Faro de Vigo, «el miedo es una emoción que para muchas personas se acaba convirtiendo en un problema, pero es una emoción natural y que nos sirve para sobrevivir”. En muchas ocasiones, cuando se complica, “nos lleva a tomar decisiones basadas en el miedo”.

P: En las primeras páginas del libro explica la importancia de entender el miedo. Pero ¿sabemos reconocerlo realmente?

R: El miedo tiene muchos matices. Un día pregunté en redes sociales y la gente lo relacionaba con parálisis, incertidumbre, preocupación… Diferentes formas en las que se puede complicar porque si el miedo nos ayuda a pensar mejor, vivir totalmente despreocupados puede hacer que nos coja un imprevisto sin ninguna medida de precaución. El problema es cuando la preocupación lo controla absolutamente todo. Y relacionarnos únicamente con este sentimiento es muy angustioso, ya que es una manera poco agradable de vivir la vida.

P: Una de las preguntas que se plantea en el libro es si podemos controlar el miedo, e incluso enseñárselo a nuestros hijos, para vivir de forma libre. ¿Es esto posible?

R: Si anulamos el miedo nos pueden pasar cosas. Es fundamental que en algunas ocasiones tengamos ese sentimiento. No sobreviviríamos. Hay personas que nacen sin sensación de dolor y mueren muy pronto, porque se hacen daño y no se dan cuenta. Y el miedo cumple una función de este estilo: que algo puede ser peligroso. Si no tuviésemos miedo sería terrible. Y controlarlo tampoco es una buena filosofía, porque significa que lo estamos conteniendo, y que cuando lo soltamos, se desborda. Por lo tanto, hay que convivir con el miedo, llevarnos bien con él, abrazarnos como hacemos con un niño pequeño cuando tiene miedo. Y llega un momento que, si entendemos cuándo y por qué aparece, tenemos la suficiente seguridad para atravesar esa situación sin quedarnos bloqueados.

P: ¿Nuestro cuerpo es capaz de expresar sentimientos como el miedo o la angustia incluso antes de que seamos conscientes de esas emociones?

R: Adquirimos más conciencia a medida que vamos cumpliendo años, y eso tarda un tiempo. Al principio, los niños son emoción pura. Son etapas del propio desarrollo. Un bebé no tiene pensamientos como tales, experimenta sensaciones y el significado de lo que está sintiendo no lo tiene él, sino que lo ve en la cara de las personas de su alrededor. Por ejemplo, si un niño tiene una enfermedad y ve a sus padres muy asustados, lo que interioriza es que está pasando algo grave. Pero si los ve preocupados, pero sosteniendo sus emociones, su percepción es totalmente diferente. Y no vale disimular. Es muy importante que los padres se cuiden para poder cuidar.

P: ¿Los padres pueden transmitir sus miedos a los hijos?

R: El miedo es innato, pero también es contagioso y aprendido. Lo traemos incorporado como una señal de alerta, que mejor que se nos active porque si no, no existiría el ser humano, pero es cierto que, si crecemos con personas que nos transmiten seguridad, aunque nos asustemos, vamos a ser más capaces de resolver ese miedo.  Sí que hay una parte aprendida y otra que se puede transmitir, aunque esto no quiere decir que como padres tengamos que adoptar una postura radical: tenemos que estar preocupados por nuestros hijos, lo que se considera razonable, no estar angustiados todo el tiempo por si les pasa algo y tomar las precauciones estrictamente necesarias.

P: Muchas veces escuchamos hablar de mamitis o papitis, ¿son los padres responsables de ese sentimiento derivado de la sobreprotección?

R: El apego está íntimamente relacionado en cómo los padres protegen y cuidan al niño. Protegerlo está bien, pero sobreprotegerlo le impide tener autonomía, que es muy importante para el desarrollo emocional, y debe haber un equilibrio. El niño debe poder hacer cosas que para su edad son perfectamente válidas, y que fomentan su autonomía, pero también necesita que le cuidemos de peligros como pueden ser, por ejemplo, las redes sociales, que son un territorio muy peligroso. Hay que tener claro que los niños son diferentes, por lo que no hay un patrón fijo de actuación. Hay niños que son más nerviosos, con más temperamento, más cariñosos…  E incluso entre hermanos. Pero tenemos que ayudarles a pasar por los momentos de dificultad y también a disfrutar de las cosas.

P: Por tanto, ¿la comunicación familiar es imprescindible, ¿no?

R: Un deporte muy conveniente es hablar con los demás, en este caso con la familia, y escuchar de verdad. Todos necesitamos que, en una conversación, cuando expresamos que estamos mal, no nos digan ‘no tienes que estar así’. Si no encontramos la salida de un problema, escuchar otro punto de vista puede hacernos pensar que es una clave para solucionar esa problemática. Aunque esto no es una ciencia exacta, ya que puede funcionar en algunas ocasiones.

(Javier Ocaña. El Faro de Vigo)